En la ciudad donde vive Frido, un niño curioso donde los haya, existe un misterioso parque, el Parque de las Lilas, cerrado a cal y canto. Cuenta la leyenda que cayó un meteorito, pero también se dice que habitan monstruos, que se oyen gritos... Frido descubrirá que lo que se esconde en el Parque de las Lilas es el árbol Bo, o el árbol de los deseos: un pequeño manzano que concede tres deseos y, además, la inmortalidad a quien pruebe sus frutas. Como nunca está en el mismo lugar, existían las figuras de los acechadores, personas que sabían leer los signos del parque y ayudaban a la gente a encontrarlo. El padre de Frido era un acechador, pero nunca había pedido nada; una vez sí lo hizo y, en lugar de pedir por su hermano enfermo, pidió tres deseos para él; su hermano muere y, arrepentido por no haber pedido por él, decide dejarlo todo y abandonarse. Finalmente las autoridades, conscientes del poder que concede el árbol, deciden cerrarlo y, a partir de ahí, surge la leyenda. Este libro es muy interesante:hay misterio, suspense y aventura.
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